Se desmayó dos veces y terminó internada tras un “bótox capilar” en una peluquería

Una clienta sufrió una grave reacción alérgica luego de un tratamiento capilar en un salón de belleza porteño. La Justicia condenó al dueño y a una empleada a pagar $520.000 de indemnización. El producto no tenía etiqueta ni certificación, y la ANMAT había alertado sobre su peligrosidad.

Una mujer que asistió a la peluquería “Quinta Avenida”, en el barrio porteño de La Boca, terminó internada tras sufrir una fuerte reacción alérgica por la aplicación de un “bótox capilar”. El hecho ocurrió el 24 de febrero de 2018 y derivó en un fallo judicial que condenó al dueño del local y a una empleada a pagar $520.000 por daños y perjuicios.

La víctima había acudido al establecimiento tras encontrarlo en una recomendación en la página de L’Oreal Argentina, empresa cuyos productos solía utilizar. Luego de realizarse un trabajo de tintura, la estilista le ofreció aplicar un “bótox capilar”, tratamiento que fue aceptado en el momento. Sin embargo, apenas comenzado el procedimiento, la mujer comenzó a sentir ardor, malestar, frío y enrojecimiento del rostro.

El personal intentó auxiliarla, enjuagándole el cabello y contactando al SAME. Durante la espera, la mujer se desvaneció, vomitó y no podía mantenerse en pie. Finalmente, fue trasladada en silla de ruedas y sufrió una nueva descompensación en la ambulancia. Ingresó en estado crítico al Hospital Argerich, donde recibió atención médica de urgencia.

Durante el juicio, el médico del SAME que la asistió declaró que la encontró en muy mal estado y que el ambiente del salón tenía un “fuertísimo olor a amoníaco”. El producto aplicado no tenía etiquetas ni fórmula declarada: se trataba de un líquido de colores verdoso y violáceo, comprado “al por mayor”.

A pesar de que la empresa L’Oreal negó cualquier vínculo con el tratamiento, la Justicia concluyó que existió una responsabilidad del salón por no garantizar la seguridad del procedimiento ni utilizar productos habilitados. La ANMAT había emitido informes advirtiendo sobre el riesgo del uso de sustancias con formol, muchas veces presentes en alisadores o tratamientos capilares informales.

La Cámara Nacional de Apelaciones en lo Civil ratificó la condena al propietario del local y a la empleada, desestimó la demanda contra L’Oreal y confirmó una indemnización total de $520.000: $500.000 por daño moral y $20.000 por gastos médicos y de traslado.