El Gobierno Nacional definirá un nuevo esquema de subsidios para la energía eléctrica y dejará atrás las categorías del Registro de Acceso a los Subsidios a la Energía (RASE). Así lo explicó Pamela Ordoñez, representante de la Asociación de Distribuidores de Energía Eléctrica de la República Argentina, en diálogo con este medio. El cambio divide a los usuarios entre quienes recibirán subsidio a la luz y quienes no, reduce los topes de consumo subsidiado y abre interrogantes para las provincias con climas extremos.
Ordoñez recordó que durante el último año se habló mucho del RASE, sus niveles N1, N2 y N3 y la inscripción obligatoria. Sin embargo, el nuevo esquema deja atrás esa segmentación. “Lo que habrá será usuarios subsidiados y no subsidiados. Se podría decir que el paraguas queda dividido en dos y dejan de figurar estos bloques de ingresos altos, medios y bajos. Se concentra todo ahora en recibir o no el subsidio”, detalló.
La continuidad de los beneficios está asegurada para quienes hicieron los trámites correspondientes, incluidos los usuarios electrodependientes. Además, quienes ya formaban parte del RASE migrarán de manera automática al nuevo sistema. “No necesitarán hacer ningún tipo de trámite”, remarcó. Los hogares de ingresos bajos pasarán directamente a recibir el beneficio, mientras que quienes integraban los ingresos altos seguirán sin subsidio. En cambio, los ingresos medios “serán evaluados caso por caso”.
Topes subsidiados a la luz
El punto más sensible del nuevo esquema es el tope de consumo subsidiado. Ordoñez explicó que los usuarios con beneficio recibirán hasta 300 kWh en los meses de invierno y de verano, y apenas 150 kWh en los meses templados. Se trata de un recorte significativo. “Es mucho menos. Hoy un usuario de N2 venía recibiendo 350 subsidiados. Pasar a 150 es un golpe”, subrayó.
Ese golpe será mayor en provincias con temperaturas extremas como Misiones, donde marzo aún registra días de calor intenso. “Para nosotros marzo todavía es un mes extremadamente caluroso y el pico de demanda lo tuvimos este año durante los primeros días de ese mes”, advirtió. En el nuevo esquema, marzo queda fuera de la temporada de verano, por lo que los usuarios solo tendrán 150 kWh subsidiados. Esa situación puede derivar en consumos rápidamente superiores al tope y en boletas más caras sin que exista un aumento tarifario.
Ordoñez señaló que será clave observar la letra fina de la resolución que se publicará en las próximas semanas. La expectativa del sector es que el Gobierno revise meses críticos para regiones del NEA y del NOA, donde el esfuerzo para contener el consumo resulta mayor. “Será un desafío ver si de ahora en adelante lo tendrán en cuenta”, afirmó.
El cambio de esquema abre una nueva etapa para el sector eléctrico y para los usuarios residenciales. Con menos margen subsidiado y una transición automática al nuevo sistema, miles de hogares misioneros dependerán del uso eficiente de la energía en un contexto de temperaturas altas y costos elevados.