El presidente estadounidense recibió a Zelenski y líderes europeos para discutir el conflicto bélico con Rusia. Mantuvo su rechazo a un cese al fuego inmediato y adelantó decisiones en 15 días.
El presidente estadounidense Donald Trump recibió este lunes a su homólogo ucraniano Volodimir Zelenski en una reunión clave para definir el rumbo de la guerra con Rusia. La cita ocurrió tras el encuentro de Trump con Vladimir Putin en Alaska, donde no lograron un acuerdo de alto el fuego pero prometieron garantías de seguridad para Ucrania.
“Dentro de poco, en una o dos semanas, sabremos si solucionamos esto o si estos horribles combates continúan”, declaró Trump durante el encuentro que incluyó a líderes europeos. El mandatario estadounidense descartó nuevamente la devolución de Crimea y el ingreso de Ucrania a la OTAN, posiciones que alinean con los intereses rusos.
La Casa Blanca congregó a la presidenta de la Comisión Europea Ursula von der Leyen, al francés Emmanuel Macron, al británico Keir Starmer y a otros seis líderes occidentales. Trump insistió en que un cese al fuego inmediato no beneficiaría a Ucrania. “Tienes un alto el fuego y ellos reconstruyen y reconstruyen, y tal vez no lo quieran”, argumentó.
El embajador de Rusia pidió “una paz justa y duradera”
Mientras Trump hablaba en Washington, el embajador ruso ante la ONU Dmitry Polyanskiy pedía una paz “justa y duradera”. “Los líderes ucranianos deberían pensar en su pueblo, que no quiere seguir luchando”, afirmó el diplomático en Nueva York.
Fuentes confirmaron que Trump y Putin mantuvieron una llamada durante la cumbre. Los detalles de la conversación se desconocen, pero ocurrió mientras Zelensky escuchaba las propuestas europeas. Los medios reportaron tensión en las discusiones sobre posibles concesiones territoriales.
El presidente ucraniano enfrenta presión para aceptar negociaciones directas con Moscú. Trump insistió en discutir “intercambios de territorio considerando la línea de contacto actual”, en referencia a las zonas ocupadas por Rusia. Europa busca evitar una solución que legitime la invasión.
La reunión terminó sin anuncios concretos pero con el plazo de dos semanas que fijó Trump. Mientras, las tropas rusas siguen avanzando en Donetsk y Ucrania reportó nuevos ataques con drones esta tarde. El reloj corre para Zelensky, atrapado entre las exigencias occidentales y la realidad militar.
Analistas coinciden en que esta semana definirá si la guerra entra en su fase final o se prolonga. Todo indica que Trump apuesta por forzar un acuerdo que permita a Washington y Moscú declarar victoria, aunque deje a Ucrania en desventaja. La resistencia europea podría ser el último freno.
Zelenski abandonó la Casa Blanca sin declaraciones. Sus aliados esperan que resista las presiones hasta la próxima cumbre de la OTAN, donde buscarán reforzar el apoyo militar. Mientras Trump juega sus cartas, Ucrania sigue pagando el precio más alto en el campo de batalla.